Se aproxima el verano, para muchos temido, para otros bendito, en mi caso muero de ganas por dejar el frio invierno atrás y poder disfrutar de temperaturas más cálidas y abandonar por fin en lo más hondo del cajón bufandas, guantes y todos los menesteres que utilizamos para protegernos del frio invierno que tan largo se nos hace. La primavera, bendita primavera, con los almendros en flor y los pájaros cantando, con las tardes más largas para poder pasear sin temor a perder los dedos de los pies por congelación.
Hace poco, en uno de estos días tan fríos, no recuerdo bien si teníamos 4 grados bajo cero, tuve que salir de viaje por cuestiones de trabajo, el caso es que tuve que desplazarme al norte, a Asturias, eso sí que es frio y no lo que hace en Madrid, que horror, todo el día tiritando, no encontraba manera de entrar en calor ni con calditos calientes. La cuestión es que de pronto y sin previo aviso, la calefacción de mi coche se estropea, pánico es lo que yo sentí cuando la encendí y por no hacer no hacia ni ruido, ese ruidito tan característico que ya solo con oírlo vas entrando en calor. No sabía qué hacer, así que opte por buscar un taller cercano a donde me encontraba, tras ponerme en contacto con un mecánico, me aconsejó que adquiriera la pieza que se había estropeado en un desguace que él conocía, que tendría muy buen precio si además les decía que iba de su parte, así que eso hice, contacté con desguaces.eu y me atendieron con mucha amabilidad. Es de agradecer que te traten bien en lugares donde te sientes una extraña, como en un desguace, para los que no sabemos nada de mecánica pues es como todos hablan en japonés y no te enteras de nada.
Adquirí la pieza que necesitaba mi coche y se la llevé al señor del taller mecánico, todo amabilidad me reparó el coche en un periquete y pude continuar con mi viaje de regreso a Madrid. Entendí entonces lo importante que es saber un poquito de todo, si bien hay una frase muy famosa que dice que el saber no ocupa lugar y bien cierto que es, con la información adecuada además de evitarte muchos quebraderos de cabeza, podemos solucionar problemas que a priori nos agobian pero que son muy sencillos de solucionar.